Cobijo Camijanes

Tu espacio de fauna en su estado y hábitat natural

lunes, 29 de marzo de 2010

Infierno cántabro

El pasado fin de semana, coincidiendo con el día del padre, unos descerebrados (ya que esta gente no tiene otro nombre), prendieron diversos fuegos a las repoblaciones de eucaliptos que se sitúan  en los montes colindantes al valle del río Nansa.
El eucalipto es una especie pirófita (se ve beneficiada con el fuego), y una vez que empieza a arder es complicado acabar con el incendio, debido a que las llamas alcanzan grandes alturas y se extienden rápidamente. Además, las condiciones metereológicas no ayudaron mucho ese día, ya que el viento soplaba con bastante fuerza y hacía unos cuantos días que no llovía, por lo que los montes se encontraban bastante secos.
Después de veinticuatro horas, la lluvia apareció y consiguió eliminar todos los focos activos.




Eucaliptal de Cantabria en llamas




Eucaliptal de Cantabria en llamas




Una vez cesadas las lluvias, los suelos rebosan de agua y la noche empieza a caer, presentándose una buena oportunidad para la observación de anfibios. Estos aprovechan los pequeños charcos que se forman en  los caminos para mantener su piel húmeda y si tienen la oportunidad de alimentarse mucho mejor.
El sapo común nos lo podemos encontrar con diferentes tonalidades de dibujos y color. En las siguientes fotografías se  muestran los detalles mencionados.




Sapo común (Bufo bufo)




Sapo común (Bufo Bufo)

Inconfundible entre los sapos de la península por su ojo generalmente cobrizo y su pupila ovalada horizontalmente. Sin olvidarnos del gran tamaño que puede llegar a alcanzar.


Detalle de sapo común (Bufo bufo)


El tritón palmeado es un habitante frecuente de los bebederos del ganado (pudiendo ser bañeras, fuentes,...). Normalmente se esconden bajo las hojas de los abrevaderos siendo difícil verlos, pero después del agua caída, el ambiente está lo suficientemente húmedo como para que se dejen ver por los prados aledaños a sus hogares acuáticos.





Tritón palmeado (Triturus helveticus)

Diferenciado del resto de los tritones ibéricos por sus líneas negras que atraviesan el ojo a ambos lados de la cabeza.


Detalle de tritón palmeado (Triturus helveticus)


Conviviendo con los tritones nos encontramos con varias sanguijuelas, la que mostramos a continuación tiene un tamaño considerable, aproximadamente 12 cm. Es una situación bastante común el que aparezcan estas dos especies juntas, ya que son aguas estancadas, pobres en oxígeno y ricas en materia vegetal.




Sanguijuela (Hirudo medicinalis)




Por último mostraros un par de fotografías una vez llegada la calma. La primera nos muestra el incio de la primavera, la llegada de nuevas especies como el alimoche. La segunda es una especie habitual durante todo el año, pero últimamente hay gente que se dedica a matarlas con el mismo criterio que utilizan para matar a los cormoranes.Ya sabemos todos que lo que prima por encima de todo es la caza y la pesca, por la cantidad de dinero que genera, en vez de una gestión medioambiental adecuada.




Alimoche (Neophron percnopterus)




Garza real (Ardea cinerea)




Esperamos que os haya gustado la entrada.
Saludos y gracias por vistitar el blog.

jueves, 18 de marzo de 2010

Territorio invadido

Durante un tiempo hemos estado observando las ramas de un gigantesco chopo muerto, principalmente habitado por toda clase de córvidos y estorninos.
Los primeros en invadir cada mañana esta zona son los estorninos y seguidamente las urracas. Normalmente suelen abandonarlo durante las últimas horas de la mañana y las primeras de la tarde. Es entonces cuando rapaces como el cernícalo o el ratonero aprovechan para utilizar estas altas ramas para otear, ya que controlan unos descampados muy extensos.
Cuando va pasando la tarde vuelven los colonos a su territorio, y si encuentran cualquier intruso, no dudarán en echarlo.


Así es el ejemplo de un cernícalo que llevaba viniendo varios días cuando el árbol estaba vacío:
Un dia que estaba tranquilamente en las ramas más altas, dejandonos una agradable sesión de fotos, fue atacado por la retguardia.




Cernícalo vulgar (Falco tinnunculus)


Cernícalo vulgar (Falco tinnunculus)


 Al parecer ese día o se le alargó su estancia o el regreso de sus habitantes fue antes de lo esperado. Por lo que el cernícalo vió la primera corneja llegar.




Corneja negra (Corvus corone)


No pretendió irse sin más, asique adoptó una postura desafiante a la corneja que venía de frente volando hacia él.




Cernícalo vulgar (Falco tinnunculus)




Una rápida estrategia del córvido consigue despistar a la rapaz y "la sombra negra" aparecerá por la retaguardia, dejando al cernícalo totalmente indefenso. Acto seguido habrá una persecucción apoyado por alguna corneja más, tres en total, y el cernícalo tardará en poder atreverse a volver.




Cernícalo vulgar (Falco tinnunculus) y corneja negra (Corvus corone)


Lo mismo pasará con dos gorriones chillones que iban dando brincos de árbol en árbol hasta llegar a este.




Par de gorriones chillones (Petronia petronia)




Poco después, serán echados uno a uno por un grupo de estorninos de forma parecida. Los estorninos se posan al lado de ellos bruscamente, de tal forma, que huyen sin rechistar.




Estornino negro (Sturnus unicolor) y gorrión chillón (Petronia petronia)




El ratonero harto de los vuelos cercanos, botes y molestias de las urracas, abandonará sin más el árbol como el resto de los "intrusos".




Busardo ratonero (Buteo buteo)

En cuanto esté preparado mostraremos en unos videos como este termina por irse por causa de las urracas y un picapinos que descansaba tranqilamente su "pico-taladro" retocándose las plumas, también sufrió varios sustos antes de marcharse como el resto.
Gracias por la visita, un saludo!

jueves, 4 de marzo de 2010

Mañanas de lluvias, tardes de sapos

Como todos sabéis, llevamos varias semanas con inclemencias metereológicas que dificultan bastante la observación de animales y sobretodo plasmar una imagen suya. Aprovechando algunos momentos en los que luce el sol, decidimos dar una vuelta por los prados y los montes cantábricos.
Hay animales, como  los anfibios que salen de sus cobijos después de las lluvias.Aprovechan  que el ambiente está húmedo para campear libremente,sin depender de cursos fluviales o regueros. Son los momentos más fáciles para observar a este grupo de animales.
Nada más salir de casa nos encontramos con un juvenil de sapo común, los charcos que se forman en las carreteras son unos lugares bastante frecuentados por estos y es aquí, por desgracia donde muchos de ellos mueren atropellados.




Juvenil de sapo común (Bufo bufo)


Seguimos caminando y al cabo de un rato localizamos en el borde de un prado un ejemplar de rana patilarga. Son poco frecuentes en esta zona, ya que abundan más en las provincias de Asturias y Galicia, pero de vez en cuando se dejan ver.




Rana patilarga (Rana ibérica)




La tarde no dió para mucho más, la noche se iba acercando y la falta de luz nos dejó los últimos momentos de la cacería de un cernícalo. Posado en un cable, la pequeña rapaz hacía guardia para intentar llevarse al estómago algún ratoncillo despistado.




Cernicalo común (Falco tinnunculus)


Llegando a casa  nos esperaba una sorpresa, un gran sapo común aparecía en un lateral de la casa alimentándose de unas cuantas tijeretas que correteaban por las paredes. El tamaño del anfibio nos llamó la atención, ya que pocas veces habíamos visto un ejemplar tan grande.




Sapo común adulto (Bufo bufo)


Según comenzó el día, no podíamos imaginar que esa misma noche nos regalase esta bonita estampa.




Luna gibosa creciente




Esperemos que os hayan gustado los sapos, y muchas gracias por visitar el blog.
Saludos.